El baile está inmerso en las actividades de preescolar, en este momento tan importante en el baile de 10 de mayo no está de más recordar que por medio del movimiento los pequeños desarrollan su capacidad de pensar y comunicarse, esto los hace competentes de forma física e intelectual.

Es por ello que el bailar no sólo es divertido, sino que forma una parte crucial en el desarrollo físico, emocional, social y cognitivo.

Promueve habilidades motoras gruesas y finas como la coordinación, fuerza, equilibrio y flexibilidad.

Los movimientos repetitivos en el baile ayudan a mejorar su control corporal y la consciencia de su cuerpo.

Emocionalmente les permite expresar y explorar una variedad de emociones siendo un medio seguro para liberarlas.

Fomenta la interacción social en los niños como: aprender a colaborar y respetar el espacio de los demás, a compartir y trabajar juntos como objetivo común.

Seguir patrones de movimiento rítmicos y de  secuencias estimula el desarrollo cognitivo de los pequeños, mejorando así su atención, memoria y concentración, así como la habilidad de seguir instrucciones y resolver problemas de manera creativa.

Estimula la imaginación y fomenta su capacidad para improvisar y crear nuevas formas de expresión.

A medida que los niños aprenden nuevas habilidades y se sienten más cómodos con su cuerpo en movimiento, su autoconfianza y autoestima aumentan; el éxito en el baile les brinda una sensación de logro y ayuda a desarrollar una imagen positiva de sí mismos.

Así que ¡SIGAMOS BAILANDO!